Extroversión, introversión y ambiversión
Porque las cosas no son blancas o negras... y mucho menos los estilos relacionales
Hace unos días, en terapia, Susana, profesora en un Instituto de alta complejidad, me decía:
No quiero estar con personas...
Sólo con animales que no me hablen y me den mimitos...
Está claro que la vida de los profesores en la pandemia se ha complicado. También la de sanitarios y la de casi todo el mundo, en realidad... Lo cierto es que Susana estaba acusando la falta de energía de tanto estar con otras personas: alumnos, otros profesores, equipo directivo...
Aunque, ¿podemos decir por eso que Susana ES introvertida?
La idea de que ser introvertido representa hablar poco y que los extrovertidos son aquellas personas que comparten sus emociones sin problemas y son sociables, es algo incompleta e inexacta. En realidad:
- ser introvertido está principalmente relacionado con la necesidad de estar en soledad para cargar pilas, para energetizarse
- ser extrovertido implica la necesidad de estar con otras personas y compartir para recargar la energía necesaria para continuar
Entonces, primera pista para conocerte y comprenderte: